Varios estudios indican que las comunidades inmigrantes y LGBTI son más propensas a experimentar eventos traumáticos. ¿Qué significa esto para esas comunidades en los Estados Unidos?
¿Qué es un trauma?
La Real Academia Española define el término trauma como un choque emocional que produce un daño duradero en el inconsciente y como emoción o impresión negativa, fuerte y duradera. Entonces, un evento traumático podría ser, por ejemplo, la pérdida de un familiar cercano, ser parte de un accidente automovilistico o ser víctima de violencia, entre muchos otros escenarios.
Algunas personas que son parte de un evento traumático desarrollan lo que los profesionales de la conducta llaman Trastorno de Estrés Postraumático. Según la Asociación Americana de Psiquiatría, este trastorno se caracteriza, en parte, por la inhabilidad de procesar el evento (o múltiples eventos), de tal forma que el individuo siente que lo revive constantemente, incluso en sueños y pesadillas; y al mismo tiempo, busca evitar estos recuerdos ya que le provocan dificultades en sus relaciones y en su vida diaria.
La Asociación Americana de Psiquiatría también indica que los índices más altos de Trastornos de Estrés Postraumático son encontrados entre los sobrevivientes de violaciones, personal militar y víctimas de genocidio por razones étnicas o políticas. Y sabemos que las comunidades inmigrantes y LGBTI han sido parte de los grupos afectados directamente por estos problemas.
La comunidad latina y LGBTI
Históricamente, es conocido que los inmigrantes son más propensos a ser víctimas de violencia, abuso y trauma en un entorno que no es su lugar de origen. Las estadísticas señalan que muchos de ellos padecen de dos tipos de trauma: pre-inmigración y post-inmigración. El primero se refiere a los eventos por los que ha pasado un inmigrante antes de salir de su comunidad, como violencia doméstica, feminicidios, pobreza o amenazas, entre otros. Este término también abarca todas las experiencias vividas durante el proceso para ingresar a los Estados Unidos, es decir: violaciones, evidenciar la muerte o desmembramiento de otra persona, robos a mano armada y muchas atrocidades más. Por otro lado, el trauma post-inmigración se refiere a los eventos traumáticos vividos luego de ingresar al país, más vinculadas a la discrimación y perpetuación de estereotipos.
Existen estudios que también revelan alta incidencia de Trastorno de Estrés Postraumático en la comunidad LGBTI: desde abuso físico y emocional por parte de la familia, hasta abuso sexual y discriminación dentro y fuera de la comunidad. Para los sobrevivientes de estos grupos, el suicidio se convierte en una opción. Por ende, los índices de suicidio entre la comunidad LGBTI tienden a ser más altos que en la comunidad heterosexual.
Ante este panorama desalentador, además se apunta a la posibilidad de que aquellos inmigrantes en los Estados Unidos que a su vez son parte de la comunidad LGBTI, están expuestos a un mayor riesgo de experimentar este tipo de traumas. Es por esto que es imperativo considerar los efectos que tiene la retórica del nuevo Presidente de los Estados Unidos y su administración en estas comunidades. Esta información nos ayuda a entender que el ambiente social en el que se desenvuelve una persona impacta su salud mental y emocional.