¡En Puerto Rico la lucha para erradicar las «terapias» de conversión sexual está viva!

El Senador independiente, José Vargas Vidot, respaldado por Rafael Bernabe del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), someterá nuevamente un proyecto de Ley que prohibiría los “Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual e Identidad de Género” (ECOSIG) o las mal llamadas “terapias” de conversión sexual en Puerto Rico. La propuesta normativa se enmarcaría dentro de los parámetros de la «Ley de Salud Mental», por lo que solo aplicaría sanciones a profesionales de la salud.

Es importante mencionar que estas prácticas crueles, inhumanas y denigrantes, van más allá de las llamadas “terapias” de conversión, pues también incluyen otros métodos como la privación ilegal de la libertad, violaciones correctivas, exorcismos religiosos y medicalización forzada, por nombrar algunas “tácticas”, para curar algo que desde décadas dejó de considerarse una enfermedad y que no hay #NadaQueCurar. Sus principales víctimas son jóvenes LGBTI+, generando un daño irreparable a su salud mental a lo largo de su vida adulta y, en el peor de los casos, orillándoles al suicidio. La pandemia de la COVID-19 exacerba estas formas de violencia, razón por la cual, hoy más que nunca es vital no dejar a nadie atrás.

“Lo que estamos tratando es que finalmente en Puerto Rico no se use ninguna excusa para incitar o promover o animar o abrir espacios para que las «terapias» de conversión puedan entrar por la cocina”: Senador José Vargas Vidot.

Es importante mencionar que una iniciativa legislativa similar fue sometida en el pasado cuatrienio en el Senado de aquel país; en ese momento abanderada por los congresistas Eduardo Bhatia, Zoé Laboy, Juan Dalmau Ramírez y Miguel Pereira. Sin embargo, el proyecto, que era un compromiso del pasado gobierno del Partido Nuevo Progresista, fue rechazado en la Cámara de Representantes, ya que de acuerdo al portavoz de la mayoría de congresistas, Gabriel Rodríguez Aguiló, se falló en demostrar que la práctica se realiza en Puerto Rico.

Al respecto, expertos en derechos LGBTI+ de la Isla han mencionado que la falta de estadísticas exactas y precisas sobre estos temas, responden al miedo de la comunidad sexogenérica de presentar querellas y ser estigmatizados, perseguidos o discriminados. Es importante mencionar que otro factor está relacionado con el hecho de que estas «terapias» en su mayoría se realizan a menores de edad, que claramente no tienen los recursos, el conocimiento o la habilidad de recurrir a alguien y expresar que quizás su familia le hizo pasar por ese proceso o que un psicólogo trató de intervenir.

Por nuestra parte, en México, los ECOSIG ya se encuentran prohibidos en la zona metropolitana de México (Ciudad de México y el Estado de México); y actualmente también se encuentran iniciativas de leyes homólogas en los congresos locales de varios Estados de la República como Sinaloa, Querétaro, Guanajuato, Jalisco y Quintana Roo; además de una iniciativa a nivel federal en el Senado de la República.

A nivel mundial se han prohibido los ECOSIG en lugares como Canberra y Queensland en Australia; California, Colorado, Nueva York y Washington en los Estados Unidos de América; así como en países del continente europeo como Suiza, Malta y Alemania.

Inclusive, cientos de líderes religiosos en el mundo se han pronunciado en contra de estas terribles prácticas crueles, inhumanas y denigrantes.

Finalmente, desde Yaaj México aplaudimos a todas y todos los activistas, líderes políticos y de opinión, y diversos aliados que apuestan por Derechos Humanos y permiten avanzar estas propuestas.

Con información de: El Nuevo Día.