Hace unas semanas, Netflix anunció el próximo estreno del documental titulado “Pray Away”, producido por Ryan Murphy y Jason Blum, el cual abordará el caso de la organización Exodus International, que durante muchos años promocionó y llevó a cabo prácticas crueles, inhumanas y degradantes conocidas como «terapias» de conversión y/o ECOSIG (Esfuerzos para Corregir/suprimir/reprimir la Orientación Sexual y/o la Identidad/expresión de Género) en contra de miles de personas LGBT+ alrededor del mundo.
El trailer de este documental abre con la frase “si quieres un cambio, hay una manera de hacerlo”, acompañado de diversos testimonios de personas que alegaban haber dejado de ser gays o lesbianas gracias a su participación en este grupo. A lo largo del promocional, se puede observar que el documental reflejará la experiencia tanto de los líderes de esta organización, como de las personas (sus víctimas) que estuvieron sometidas a estas prácticas y el daño que les generó.
Exodus International, perteneciente a un grupo llamado Exodus Global Alliance con presencia internacional, fue una de las asociaciones cristianas más grandes del denominado “movimiento ex-gay” el cual predominó preponderantemente en los Estados Unidos, aunque también logró posicionarse en muchos otros países. Durante 37 años, esta organización afirmó y promovió que a través de la oración y “terapias reparativas” se podía cambiar la orientación sexual e identidad de género de todas aquellas personas que acudieran a ellos.
Al igual que muchos grupos religiosos, Exodus contaba con una infraestructura muy sólida. En sus mejores momentos, la organización llegó a tener un presupuesto para operar de más de un millón de dólares, contando con 25 empleados y llegó a coordinar a más de 400 sucursales en 17 países.
De acuerdo a testigos que acudieron a este grupo, muchas personas llegaron a sufrir de humillaciones, agresiones sexuales y prácticas que terminaron afectándoles a nivel emocional. Inclusive, a través de los años hubieron líderes de esta asociación que admitieron saber que dichas terapias eran una estafa, ya que sabían que la orientación sexual o la identidad de género no podía cambiarse a través de las “terapias reparativas” y que reconocían que únicamente estaban provocándole daños a las personas que acudían a Exodus (para más información da clic encima de esta frase).
Spoiler alert (not really): Después de muchos años de haber lucrado con la desinformación y salud mental de miles de personas, en el 2013 la operación de este grupo llegó a su fin. Sin embargo, no debemos olvidar que tanto en México como en otros países, siguen existiendo este tipo de grupos que continúan cometiendo prácticas en contra de los derechos humanos de la comunidad LGBTI+ y que están enriqueciéndose a costa de la vida de miles de jóvenes y sus familias.
Así que todes tenemos una cita para el próximo 3 de agosto que será la fecha de estreno de Pray Away. Es crucial que no nos perdamos este histórico documental que nos trae NETFLIX, ya que podremos escuchar los testimonios tanto de líderes como de usuarios, de uno de los grupos más famosos que han llevado a cabo ECOSIG y del daño que éstos han generado. Además, será una muy buena oportunidad para seguir recordando que estas prácticas deben ser prohibidas y que no hay #NadaQueCurar.
¡Hasta la próxima!